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Redacción | Julio García
Publicación | 23 de Abril del 2024
Estamos entrando en una nueva fase en toda esta locura mundial. Ya han pasado 4 años desde que a todos nos encerraron ilegalmente con la excusa de un bicho que volaba y propagaba muerte y dolor, aunque como ya sabrán, los que propagaban muerte y dolor eran precisamente otros. Cada día que pasa, son más los que empiezan a dudar de toda esta trama, está claro que es un proceso lento, pero también es firme, ya que todos aquellos que conocen la trama que se desarrolló desde 2020 hasta la fecha, nunca más volverán a creen en los medios y líderes políticos. Una trama, dicho sea de paso, que ha perjudicado a la población, pero benefició a la clase política, destruyó empresas, familias enteras y causo otros daños que a día de hoy aún son incalculables. Esa promesa política de que saldríamos más fuertes, ahora la entendemos mejor que nunca porque es notorio que se referían a ellos mismos. La clase política y todo su entramado no quedó atrás. A nosotros nos despojaron de libertad de oportunidad de réplica y cada día que pasa tenemos menos poder adquisitivo y por ende menos futuro. En cambio, aquellos que decían que lo hacían todo por nuestro bien, durante los últimos cuatro años no han cesado de comprarse propiedades, invertir en países extranjeros y hacer caja en otros temas que en esta plataforma por la fulminante limitación de la libertad de expresión no podemos contar.
Estamos muy cerca de algunas elecciones provinciales en nuestro pais, así como otros procesos electorales en otras naciones, por lo que es importante señalar a la casta política como los culpables de todos nuestros males. Aun así, todo político ofrece su mejor sonrisa y asegura que su objetivo es mejorar la calidad de vida de la gente cuando llegan los comicios. Nada más lejos de la realidad. Llevamos 45 años aproximadamente de supuesta democracia, y haciendo un balance poco ortodoxo pero certero, los únicos que han salido ganando desde aquel 1978 es la propia clase política. Y da igual del color que sea la formación, todos se someten a indicaciones y exigencias extranjeras. Ustedes ya me entienden.
Y sí, estamos hablando de España, ¿Pero que pasa en el resto de los países? Desgraciadamente lo mismo en mayor o menor medida. En algunos territorios de la unión europea, el expolio de las arcas públicas o el robo directo via impuestos a los ciudadanos existe, pero tal vez sin tanto descaro como está ocurriendo en nuestro país. Y mientras ejercen más presión fiscal a nuestras vidas, robando descaradamente a costa del sufrimiento nacional, como es el caso que salpica y de que forma al partido socialista con el caso Koldo, nosotros, el pueblo en cualquier caso, sigue embobado frente a la televisión aplaudiendo con las orejas ante cualquier distracción a la que nos someten con el fin de que nunca alcancemos la realidad de los hechos.
En el ámbito internacional, sucede más o menos lo mismo. La televisión juega al despiste para que el ciudadano no conozca la verdad. Pero lo grave de todo esto, es que a día de hoy, después de 4 años de mentiras por un lado y por otro, hay personas que siguen depositando su confianza por no decir su vida, ya no en partidos políticos de uno y otro color, sino en supuestos salvadores o profetas como Trump o Putin. Normalmente estos sujetos se hacen llamar patriotas, pero patriotas de otro país, de otros intereses y de otra realidad. Son personas que después de 4 años de pantanos drenados, de túneles, de alianzas y militares blancos que están acabando con el cabal, siguen diciendo cuando les interpelas que no entiendes, que ahora si que si, que ya verás cuando vuelva a gobernar Trump. Sin duda, se trata de personas que necesitan creer que alguien acabará con esta sinrazón mundial. No pueden concebir la idea de que solo nos tenemos a nosotros mismos. No quieren razonar y reconocer que desde 2019 al menos, todo ha sido una mentira para tenernos esperanzados, inmóviles y entregáramos así nuestra ira a ciertos equipos militares que no existían y que decían estaban luchando contra los malos.
No quieren escuchar ni reconocer que han sido víctimas de otro engaño. Y que este engaño bien orquestado les llevará al desastre si no logran deshacerse de este embrujo. No quieren creer aún que para cierta etnia con la nariz muy grande, Trump es el mesías esperado para la construcción del tercer templo. No quieren reconocer que el presidente de Rusia, forma parte de ese engranaje que lo destruirá todo. Y es que no hay líder político que ocupe un puesto relevante, que no esté dirigido por organizaciones ocultas o ocultistas de poder. Las logias acaparan toda la política mundial y no hay nada ni nadie que escape a su control.
Sin ir más lejos, algunos hablaban de que Rusia, la india y china iban a destronar al gran poder que es estados unidos. Nos dijeron entre otras cosas, que iban a basar sus monedas en el patrón oro y que las monedas digitales y demás brujerías no llegarían a implantarse, pero todos hemos visto ya lo que ha ocurrido realmente, pues otra decepción que los supuestos patriotas no quieren reconocer.
Tanto Rusia, como la india por no decir china, se involucraron hace tiempo en la moneda digital y ya la tienen implantada en sus países. Si, esa misma moneda que implantará Europa y nos despojara de toda libertad.
Reconozco que, en estos últimos 4 años nos hemos equivocado en mayor o menor medida, aunque la mayoría hemos creído en cuatro charlatanes pero oigan, en estos últimos 4 años también hemos aprendido o hemos tenido la oportunidad de aprender ¿Verdad? Pues no todo el mundo. A día de hoy, aún hay una parte de la mal llamada disidencia, que continúa esperando la acción de un líder o profeta, sobre todo, para que ellos no tengan que afrontar la realidad y puedan seguir sentados en el sofá despotricando de vídeos como este. Por no hablar de los que aún y después de la que ha caído social y políticamente en los últimos cuatro años, sigue depositando su confianza en partidos políticos de uno u otro bando. Y oigan, los defienden como si la vida les fuera en ello.
Aplaudir a un político, es igual que aplaudir al cajero automático de un banco por darte tu propio dinero. Es lo más absurdo que jamás han visto mis ojos. Es duro reconocerlo, pero debo ser sincero conmigo mismo y creo que la mal llamada resistencia como tal nunca existió. Aquí sólo hemos hecho resistencia personal y nunca hemos pensando en la comunidad. Por un lado los comunicadores de la manoseada y caduca resistencia, han hecho negocio con el interés de los espectadores. A muchos comunicadores sólo les preocupa los likes, los suscriptores y como no, que vean su vídeo el mayor número posible de personas para que ellos, que denuncian el sistema y están en contra, puedan seguir viviendo de él a cuerpo de rey. Y luego están los fanáticos de los diferentes canales, hooligans que no toleran que se les lleve la contraria, si piensas diferente a ellos eres disidencia, o si intentas poner un poco de sentido común en algún tema, avisan a sus aliados para que entren en tu canal a sabotearlo. Y esos son los despiertos o los que dicen defender la libertad y la opinión.
Los grabes hechos descritos en este video, desde los líderes que nos salvarán, hasta los hooligans que atacan a un canal por no pensar de la misma forma que ellos, están bien vistos por algunos comunicadores que además han jaleado a sus seguidores para que atacaran a todo aquel que pensara diferente.
En definitiva, si quieren tratarse con un poco más de respeto a si mismos, no crean en líderes extranjeros, ni en militares fantasma, ni pantanos, ni en rojos, azules, verdes o en ardillas. Estamos en tiempos de falsos profetas, en tiempos de jinetes que levantarán la bandera de la libertad para ganar nuestra confianza para conseguir sus intereses y no los nuestros. Aquellos que creen en gurús, están siendo utilizados e hipnotizados por el hechizo del nuevo establecimiento mundial aunque crean que no. Créanme, no hay nadie en este mundo que se juegue la vida por los demás, y si existe, no está en política.
